Silvia y Javier
E sta es la boda de las miradas y las sonrisas dedicadas. La naturalidad de los novios convirtieron una estructura típica de boda en algo mucho más especial, en momentos compartidos con los amigos, en abrazos espontáneos, en amigos animando a los novios durante un baile divertidísimo, en niños paje disfrutando de la ceremonia y en un paseo por el campo que a ratos se convertía en algo más romántico que un respiro a solas para tomar conciencia de ese momento de felicidad.
Amar es encontrar en la felicidad de otro tu propia felicidad. Leibniz